La exposición ‘1965 – 2011’ presenta 37 obras de la colección de tendencias y estilos plurales
La Fundación Stämpfli presenta 37 obras de su fondo de arte contemporáneo, en una muestra de tendencias, estilos y temáticas poliédricas, que se podrá ver hasta abril de 2025. Bajo el título 1965 – 2011, la exposición despliega en las salas 1, 2 y 3, trabajos de una treintena de artistas de orígenes diversos, que tienen en común haber desarrollado su trayectoria en París a partir de los años 60 del siglo XX.
1965 – 2011 es el título de una propuesta que enmarca la presentación entre dos fechas. Del año 1965 data de la obra más antigua: Rue Lafayette (Ap19), un pequeño formato de carteles rasgados sobre lienzo de Jaques Villeglé, el artista más representativo del affichismo. Del año 2011 es la más reciente: Atmosphère chromoplastique N° 992, un relieve acrílico sobre madera de Luis Tomasello, representativo del cinetismo óptico latino-americano y afincado en París desde los años 60.
Entre ambas fechas dialogan las más de treinta obras que configuran la exposición y que aparecen presentadas como un itinerario discontinuo de las diferentes tendencias de las artes visuales del último tercio del siglo XX y principios del XXI. París, en tanto que capital cultural y polo de atracción de artistas, actúa como nexo: la mayoría de artistas presentes –franceses y otros catorce países– desarrollaron su trayectoria en esta ciudad.
La exposición es una propuesta plural, que permite aproximarse con precisión a la completa colección de la Fundación Stämpfli, creada a partir de las donaciones que sus autores o descendientes han realizado al matrimonio Pere y Anna Maria para construir el fondo actual. Con esta presentación, las tres salas (dos del antiguo Mercat del Peix y una de Can Mec) adquieren un aspecto totalmente renovado, con obras que en varios casos nunca habían compartido estancia.
Las salas:
La Sala 1 presenta lo que puede considerarse como “la otra vida de las cosas”, la radical propuesta de los años 60 del s. XX de una generación de artistas jóvenes que extrajeron de su hábitat natural objetos banales de la vida diaria y los ascendieron al escenario de las galerías de arte y los museos como personajes cargados con potencial suficiente para generar en el espectador una reflexión estética y social nueva y distinta. A su lado, se muestra la geometría, tan diversa entre ella, como la de las dos obras de Rocamora y Stämpfli, y las dos Mark Brusse, que marcan un paréntesis.
En este espacio, lo primero que se visita según se entra en la exposición, se exponen obras de Mark Brusse, Gérard Deschamps, Erró, Marco Grandeschamps, Piotr Kowalski, Jean-Luc Parant, Pavlos, Antonio Recalcati, Peter Stämpfli y Joan Rocamora.
La Sala 2 presenta una fotografía de la faceta más heterogénea de la colección. Los títulos orientan al espectador a interrogar las imágenes y descubrir qué puede haber detrás de desconcertantes alusiones: a la impaciencia de una figura mitológica; en la extraña reunión de Goya y el Nautilus de Julio Verne; a un pintor del s. XIX, Auguste Radier, o a la secreta aparición de otro del XX, Georges Mathieu; los paisajes y escenas creadas por el sol junto a un par de volcanes en activo; la poesía de unos pensamientos olvidados, el beso propio de la escena final de una película policíaca o a una madre enseñando a leer a su hijo completan el recorrido.
En este espacio se exponen obras de François Arnal, Mark Bruse, Pierre Buraglio, Daniel Dezeuze, Konrad Klapheck, Ladislas Kijno, Jacques Monory, Antoni Taulé, Jacques Ville-glé y A Sun Wu.
La Sala 3 presenta otra fuerte personalidad de la colección: la abstracción geométrica y cinética. Las obras expuestas parten del propósito de los artistas al encontrar una identidad entre las leyes artísticas y las de la naturaleza. La abstracción tiene un objetivo: “la expresión de la realidad pura”, entendida como la supresión de cualquiera de las formas visibles, ya sean de los objetos o de cualquier forma de la naturaleza.
El contraste absoluto con este objetivo viene dado por las tres fotografías en blanco y negro situadas a la izquierda de la entrada en el espacio. A mitad del camino entre ambas posiciones, se encuentra la composición abstracta realizada con material de construcción situada en medio de la sala.
En este espacio se exponen obras de Rafael Canogar, Horacio García Rossi, Claire-Jeanne Jezequel, Peter Knapp, Daniel Pommereulle Sato Satoru, Luis Tomasello, Niele Toroni, Michael Warren y Joel-Peter Witkin.